miércoles, 24 de diciembre de 2014

¡FELIZ NAVIDAD!



Desde el Museo De Arte Sacro de Piedrahíta os deseamos a todos una FELIZ NAVIDAD. Que disfrutéis de esta noche y del día de mañana con vuestros seres queridos; aprovechad para descansar y pasar buenos ratos con familia y allegados.




miércoles, 10 de diciembre de 2014

Crónica - Cinefórum "La ola" 8/XII/2014




El domingo día 8 de diciembre, el el primer piso de la La Panera Gourmet de Piedrahíta se llenó con un gran espectáculo: cine. El séptimo arte sirvió para dar comienzo, en el marco de la segunda edición de "De cañas con la cultura" a lo que pretendemos que sea un Cinefórum cíclico en el que, además del visionado de películas de diversa procedencia y cinematógrafías poco habituales, podamos debatir, conversar y discutir sobre los temas y las impresiones que dichos filmes nos suscita.

El largometraje elegido para la apertura fue La ola (Die Welle), film alemán de 2008 dirigido por Dennis Gansel. y está basada en un experimento llamado "La tercera ola" llevado a cabo por un profesor de instituto en California en los años 60, que instó a sus a sus alumnos a comportarse como miembros de un grupúsculo autoritario e, incluso, fascista, y que tuvo resultados no deseados. La película traslada la acción a la Alemania actual, lo cual la hace más interesante si cabe.

Cartel oficial de la película


El cine alemán siempre ha sido uno de los más importantes de occidente, y su influencia ha ido paralela a la influencia de la cultura germana sobre el resto del mundo. Fue en lo años 20, en una época convulsa tras la I Guerra Mundial, donde se desarrolló el expresionismo fílmico, en el que directores como Murnau o Fritz Lang (y también los inicios de Billy Wilder y Marlene Dietrich), como películas aún mudas, llegaron a las más altas cotas de creación cinematográfica. Los nazis borraron toda esa creatividad, no sin antes utilizarla para su detestable propaganda en la figura de la genial directora Leni Riefenstahl.

Fotograma de la película



En los años 70 nuevos directores como Fassbinder, Werner Herzog o Wim Wenders volvieron a poner el cine alemán en lo más alto del arte europeo.
En la última década, nuevos directores jóvenes han devuelto la actualidad a los filmes teutones y han conseguido cierta popularidad entre los espectadores, sobre todo europeos.

A diferencia de los creadores de los años 20, que centraban su visión en el futuro sombrío que amenazaba a Alemania y a Europa, o de los autores de los años 70, centrados en los problemas y las contradicciones de su época, la nueva oleada de cineastas parece que tiende a lanzar su mirada hacia el pasado. Algo especialmente importante para un país como Alemania, que ha visto en sus propias carnes el terror de los dos grandes totalitarismos del siglo XX: el fascismo (en su versión nazi) y el comunismo. Por eso, que los alemanes se pregunten por su pasado supone un gran reto y un ejemplo para otros países, como España, que aún tienen deudas pendientes con su memoria histórica.

Ejemplos de ello son filmes como Goodbye Lenin! El Hundimiento, películas sobre alemanes que se opusieron al nazismo como Sophie Scholl o el coronel von Stauffenberg, La vida de los otros, la serie, enormemente recomendable Hijos del Tercer Reich o esta La ola, que aunque está ambientada en la actualidad, su relación con el pasado es muy evidente.

En fin, sólo nos queda daros las gracias a todos los que estuvisteis el domingo en "La Panera" viendo La ola y debatiendo sobre los grandes temas que transmite la película. Estamos seguros de que a todos nos dejó un buen poso y un gran sabor de boca.





¡Hasta la próxima!

viernes, 5 de diciembre de 2014

Cinefórum: La ola (De cañas con la cultura II)



Tras el gran éxito de nuestra primera edición de "De cañas con la cultura" celebrada en octubre, seguimos con nuevos proyectos y esta vez, queremos sumergirnos en el mundo del cine para ver con vosotros "La ola", una película alemana de 2008 que analiza temas como el autoritarismo, el adoctrinamiento y los movimientos de masas. Un film francamente interesante, que nos lleva a reflexionar y que, sin duda, no dejará a nadie indiferente.


Asistentes a la I edición de "De cañas con la cultura"


Una vez más, colaboramos con La Panera Gourmet, a quién agradecemos la cesión del local y os esperamos allí a todos el domigo día 7 de diciembre a las 19:00 horas. Tras la visualización del largometraje, daremos paso a un coloquio en el que todos estáis invitados a participar y que, estamos seguros, será enormemente fructífero.

Os dejamos con la ficha de la película (vía filmaffinity):

La ola



Título original
Die Welle
Año
2008
Duración
110 min.
País
 Alemania
Director
Dennis Gansel
Guión
Dennis Gansel, Peter Thorwarth (Novela: Todd Strasser)
Música
Heiko Maile
Fotografía
Torsten Breuer
Reparto
Jürgen VogelFrederick LauJennifer UlrichMax RiemeltChristiane PaulElyas M'BarekJacob MatschenzCristina Do RegoMaximilian MauffMaximilian VollmarFerdinand Schmidt-ModrowTim Oliver SchultzAmelie KieferFabian PregerOdine Johne
Productora
Constantin Film Produktion / Rat Pack Filmproduktion / Medienfonds GFP
Género
Drama | Basado en hechos realesEnseñanzaColegios & Universidad.AdolescenciaSectas
Sinopsis
En Alemania, durante la semana de proyectos, al profesor de instituto Rainer Wenger (Jürgen Vogel) se le ocurre hacer un experimento para explicar a sus alumnos el funcionamiento de un régimen totalitario. En apenas unos días, lo que parecía una prueba inócua basada en la disciplina y el sentimiento de comunidad va derivando hacia una situación sobre la que el profesor pierde todo control. (FILMAFFINITY)
Premios
2008: Premios del Cine Europeo: 2 nominaciones: premio del público y actor (Vogel)
2008: Festival de Sundance: Sección oficial World Cinema - Drama
2008: Festival Internacional de Estambul: Premio Especial del Jurado


¿Cuándo?: 7 de diciembre, 19:00
¿Dónde? La Panera Gourmet - C/Somoza (Piedrahíta)

viernes, 10 de octubre de 2014

De cañas con la cultura - I edición: El convento de Sto. Domingo de Piedrahíta

¿Qué os parece si nos vamos de cañas con la cultura?





El día de 11 de octubre nos vemos en La Panera Gourmet de nuestra villa para debatir algunos temas relacionados con el Convento de Santo de Domingo de Piedrahíta. Se desarrollará un debate ameno y distendido en torno a la historia del monumento, su estado de conservación y la posible oferta turística de sus ruinas, ¿te lo vas a perder? 





Día 11 de octubre
19:00 horas
Bar La Panera




¡Os esperamos!

jueves, 11 de septiembre de 2014

CLAUSURA DE LAS JORNADAS: Mesa redonda y visita al convento de Sto. Domingo


Y llegó el último día de estas jornadas culturales y no pudo hacerlo de mejor forma. Con un público expectante que abarrotó (¡otra vez! y van muchas este verano) el espacio donde se celebró la mesa redonda (en esta ocasión, el salón de actos del I.E.S. Gredos) que servía como colofón a todo un mes de actividades culturales.



            En la mesa redonda, que sirvió también como clausura intervinieron José Antonio Elvira, Esteban Buenadicha, Rodrigo González Labrador, Ángel Hernández, Pablo Martín Hernández y, por último, Oscar Pacheco Andrada.

            Abrió el debate José Antonio Elvira, quien destacó el buen hacer de todos los participantes en estas jornadas y celebró que hubiesen tenido gran acogida entre los piedrahitense. Esteban Buenadicha continuó aportando unas pinceladas históricas sobre el convento de Sto. Domingo, que tras la desamortización de principios del siglo XIX pasó a ser cementerio de la Villa.



            Rodrigo González Labrador, joven técnico en turismo de interior destacó las posibilidades de explotación turística que tiene nuestro entorno: turismo natural y ecológico, cultural y religioso; y añadió que la restauración del antiguo convento y camposanto como un cementerio romántico y un centro de interpretación comarcal marcarían un punto de inflexión en el desarrollo turístico de Valdecorneja.



            Ángel Hernández, presidente del colegio de arquitectos de Ávila, habló de las continuidades y discontinuidades urbanísticas que se producen en los entornos urbanos, destacando la unidad entre el convento, los jardines y el palacio de los duques de Alba y el casco histórico de la villa.

            Pablo Martín Hernández nos enseñó su proyecto para una futura restauración del convento, en la que se incluirían un Museo de la Guerra de Independencia y la Ilustración, un museo de Arte Contemporáneo y un centro de interpretación de Valdecorneja. El proyecto, bellísimo, podéis visualizarlo en el siguiente vídeo:



            Finalizaron las ponencias con la intervención de D. Óscar Pacheco, quien hizo un llamamiento a las autoridades, desde las más bajas a las más altas instancias, para que cumplieran su deber y se hicieran cargo de las ruinas.



            Tras la mesa redonda, se procedió a la visita al convento, no sin antes dejar constancia de nuestro descontento por el estado deplorable en el que se encuentran las ruinas, y de la necesidad de recuperarlas. Para ello se puso en marcha una recogida de firmas que aún sigue en pie, pudiendo firmar la petición a través de internet en change.org o acudiendo a los diferentes establecimientos de Piedrahíta y al Museo de Arte Sacro, donde todavía están depositadas las hojas.



            La visita acabó con sorpresa final: la música volvió a sonar dos siglos después, poesía bajo el ciprés desmochado pero no quebrado y arte en la magnífica capilla gótica cisterciense. Fin de fiesta y hasta pronto.



            Os dejamos, como otras veces, con la presentación en PWP que se pudo ver al comienzo del debate:





miércoles, 10 de septiembre de 2014

CRÓNICA: Tres poemas filosóficos españoles (21/VIII/2014)




Si la poesía es el alimento del alma, los que estuvimos el pasado 21 de agosto en el espacio cultural Caja de Ávila asistimos a un banquete digno de reyes. D. Óscar Pacheco Andrada, por todos conocido en la Villa, excepcional conferenciante, nos deleitó, durante más de hora y media de animada ponencia, con una sensacional muestra del ingenio de tres de nuestros más grandes poetas contemporáneos: Miguel de Unamuno, Juan RamónJiménez y Luis Cernuda.






            A pesar de las incidencias técnicas, que nos impidieron contemplar la presentación de imágenes y sonido que nos tenía preparadas D. Óscar, disfrutamos, no obstante,  de una acogedora velada.

            El tema de Dios, el Dios de los filósofos, fue el hilo conductor de tres poemas de hondo cariz filosófico. El Dios de los filósofos, un Dios personal e íntimo, que cada bardo interpreta con su indiscutible genio. Además, fue de particular interés la relación que D. Óscar estableció entre los tres escritores y nuestra villa, como luego veremos.




            Nuestro querido profesor, bilbaíno de nacimiento y charro de sentimiento y adopción, fue el primero en aparecer en escena con su soneto Oración de un ateo:


Oye mi ruego Tú, Dios que no existes,
y en tu nada recoge estas mis quejas,
Tú que a los pobres hombres nunca dejas
sin consuelo de engaño. No resistes

a nuestro ruego y nuestro anhelo vistes.
Cuando Tú de mi mente más te alejas,
más recuerdo las plácidas consejas
con que mi ama endulzóme noches tristes.

¡Qué grande eres, mi Dios! Eres tan grande
que no eres sino Idea; es muy angosta
la realidad por mucho que se expande

para abarcarte. Sufro yo a tu costa,
Dios no existente, pues si Tú existieras
existiría yo también de veras.

            En él se nos muestra uno de los grandes temas unamunianos: la propensión a, la necesidad, la búsqueda de mortalidad.
            La relación de Unamuno con Piedrahíta recae en la figura del poeta Mariano de Santiago Cividanes, piedrahitense discípulo del escritor y única persona que acompañó a su casa al rector después de los terribles e infames incidentes de aquel 12 de octubre de 1936.



            El Dios de Juan Ramón Jiménez es de otro cariz. Para nuestro premio Nobel, Dios es sinónimo de creación.[i] Creador es el poeta, que crea un universo de palabras y le pide a Dios que lo llene. Así podemos observarlo su poema El nombre conseguido de los nombres, que forma parte de su poemario Dios deseado y deseante (1948-49):



Si yo, por ti, he creado un mundo para ti,
dios, tú tenías seguro que venir a él,
y tú has venido a él, a mí seguro,
porque mi mundo todo era mi esperanza.

Yo he acumulado mi esperanza
en lengua, en nombre hablado, en nombre escrito;
a todo yo le había puesto nombre
y tú has tomado el puesto
de toda esta nombradía.

Ahora puedo yo detener ya mi movimiento,
como la llama se detiene en ascua roja
con resplandor de aire inflamando azul,
en el ascua de mi perpetuo estar y ser;
ahora yo soy ya mi mar paralizado,
el mar que yo decía, más no duro,
paralizado en olas de conciencia en luz
y vivas hacia arriba todas, hacia arriba.

Todos los nombres que yo puse
al universo que por ti me recreaba yo,
se me están convirtiendo en uno y en un dios.

El dios que es siempre y al fin,
el dios creado y recreado y recreado
por gracia y sin esfuerzo.
El Dios. El nombre conseguido de los nombres.

            Obsérvese que, durante todo el poema, dios aparece en minúscula, excepto en el último verso, donde ya aparece en mayúscula. Podemos escuchar una grabación con la voz del autor recitando este poema aquí.





            Su relación con nuestro pueblo viene dada por la lectura de la prosa de José Somoza, insigne liberal y romántico que amó a su patria chica como nadie. “Me he pasado toda la noche leyendo los artículos de José Somoza y no he podido parar, él es el responsable de no haber dormido”, llegaría a decir el de Moguer a un amigo suyo.






             Por último, el sevillano Luis Cernuda se acerca a la idea de Dios desde su visión solitaria, dolorida y sensible, como muestra en los versos de su “miserere” La visita de Dios:

Pasada se halla ahora la mitad de mi vida.
El cuerpo sigue en pie y las voces aún giran
y resuenan con encanto marchito en mis oídos,
mas los días esbeltos ya se marcharon lejos;
sólo recuerdos pálidos de su amor me han dejado.
Como el labrador al ver su trabajo perdido
vuelve al cielo los ojos esperando la lluvia,
también quiero esperar en esta hora confusa
unas lágrimas que aviven mi cosecha.

Pero hondamente fijo queda el desaliento,
como huésped oscuro de mis sueños.
¿Puedo esperar acaso? Todo se ha dado al hombre
tal distracción efímera de su existencia;
a nada puede unir esta ansia suya que reclama
una pausa de amor entre la fuga de las cosas.
Vano sería dolerse del trabajo, la casa, los amigos perdidos
en aquel gran negocio demoníaco de la guerra.

Estoy en la ciudad alzada para su orgullo por el rico,
adonde la miseria oculta canta por las esquinas
o expone dibujos que me arrasan de lágrimas los ojos.
Y mordiendo mis puños con tristeza impotente
aún cuento mentalmente mis monedas escasas,
porque un trozo de pan aquí y unos vestidos
suponen un esfuerzo mayor para lograrlos
que el de los viejos héroes cuando vencían
monstruos, rompiendo encantos con su lanza.

La revolución renace siempre, como un fénix
llameante en el pecho de los desdichados.
Esto lo sabe el charlatán bajo los árboles
de las plazas, y su baba argentina, su cascabel sonoro.
silbando entre las hojas, encanta al pueblo
robusto y engañado con maligna elocuencia,
y canciones de sangre acunan su miseria.

Por mi dolor comprendo que otros inmensos sufren
hombres callados a quienes falta el ocio
para arrojar al cielo su tormento. Mas no puedo
copiar su enérgico silencio, que me alivia
este consuelo de la voz, sin tierra y sin amigo,
en la profunda soledad de quien no tiene
ya nada entre sus brazos, sino el aire en torno,
lo mismo que un navío al alejarse sobre el mar.

¿Adónde han ido las viejas compañeras del hombre?
Mis zurcidoras de proyectos, mis tejedoras de esperanzas
han muerto. Sus agujas y maderas reposan
con polvo en un rincón, sin la melodía del trabajo.
Como una sombra aislada al filo de los días,
voy repitiendo gestos y palabras mientras lejos escucho
el inmenso bostezo de los siglos pasados.

El tiempo, ese blanco desierto ilimitado,
esa nada creadora, amenaza a los hombres
y con luz inmortal se abre ante los deseos juveniles.
Unos quieren asir locamente su mágico reflejo,
mas otros le conjuran con un hijo
ofrecido en los brazos como víctima,
porque de nueva vida se mantiene su vida
como el agua del agua llorada por los hombres.

Pero a ti, Dios, ¿con qué te aplacaremos?
Mi sed eras tú, tú fuiste mi amor perdido,
mi casa rota, mi vida trabajada, y la casa y la vida
de tantos hombres como yo a la deriva
en el naufragio de un país. Levantados de naipes,
uno tras otro iban cayendo mis pobres paraísos.
¿Movió tu mano el aire que fuera derribándolos
y tras ellos en el profundo abatimiento, en el hondo vacío,
se alza al fin ante mí la nube que oculta tu presencia?

No golpees airado mi cuerpo con tu rayo;
si el amor no eras tú, ¿quién lo será en este mundo?
Compadécete al fin, escucha este murmullo
que ascendiendo llega como una ola
al pie de tu divina indiferencia.
Mira las tristes piedras que llevamos
ya sobre nuestros hombros para enterrar tus dones:
la hermosura, la verdad, la justicia, cuyo afán imposible
tú solo eras capaz de infundir en nosotros.
Si ellas murieran hoy, de la memoria tú te borrarías
como un sueño remoto de los hombres que fueron.

            ¿Qué relación tuvo Cernuda con Piedrahíta? Según Oscar Pacheco, Cernuda identificó El risco de la pesqueruela de nuestro paisano Somoza como primer poema en prosa de toda la literatura española.





            No podemos dejar de recomendar, además, la lectura de dos grandes poemas de Cernuda: el dedicado a García Lorca, A un poeta muerto y, sobre todo, Donde habite el olvido, desolados y pesimistas versos que no obstante alcanzan una sobrecogedora belleza, inspirados en el final de un poema de Bécquer. Aquí, además, podéis escuchar la versión musical que compuso e interpretó Enrique Morente.
            Fueron mencionados otros muchos autores y otras muchas obras, que animamos desde aquí a conocer y a leer: Gabriel Aresti y su impresionante poema Defenderé la casa de mi padre (original en euskera aquí), el poeta inglés Alfred Tennyson, Henri Bergson, Antonio Machado o Ludwig Wittgenstein (el filósofo más importante del siglo XX) y su Tractatus Logico-Philosophicus. Además del interesantísimo artículo “Dios a la vista” de Ortega y Gasset, María Zambrano, San Agustín, Nietzsche, Platón…
            Tras la conferencia, vino la ronda de preguntas, siempre participativa y enriquecedora, dejando un gran sabor de boca a todos los asistentes. Un cierre perfecto para una “semana filosófica” cargada de actividades culturales.





            En el siguiente enlace podéis escuchar la conferencia en nuestro servicio de podcast:






[i] Recordemos que este año se celebra el centenario de la primera edición de Platero y yo.